La Voz de Almería
Miguel Cabrera, mcabrera@lavoz.almeria.net
El puerto de Almería quedará en una clara situación de desventaja respecto a la inmensa mayoría de puertos europeos por no estar conectado al ferrocarril, tal y como reflejan las conclusiones y directrices acordadas recientemente en el Libro Verde de los Puertos Europeos, elaborado por la UE. José Antonio Amate, presidente de la Autoridad Portuaria Almería-Motril, quien estuvo presente en las reuniones que dieron lugar a este Libro Verde, no puede ser más claro en sus conclusiones sobre la situación en que quedará Almería: “Si no logramos que el ferrocarril entre en el puerto vamos a quedar en una posición muy débil frente a ciudades vecinas”. Esta desventaja se podría traducir tanto en la ausencia de ayudas o subvenciones, como en numerosas dificultades para conseguir mercancías, a restricciones al transporte por carretera y por las facilidades que, por contra, la UE establecerá en sus políticas de desarrollo para puertos con ferrocarril . El Libro Verde es un documento de trabajo y discusión sobre el transporte marítimo, organización, infraestructuras y financiación de todos los puertos, que ha sido elaborado por la Unión Europea en Barcelona, y será la base del futuro Libro Blanco sobre Transportes Marítimos y Puertos. El Libro Blanco recogerá todas las directrices y parámetros de actuación de la Unión Europea en cuestión de puertos. Una de las líneas más importantes acordadas en Barcelona fue una apuesta muy explícita a favor del transporte marítimo frente a la carretera, y sobre todo marca como un objetivo fundamental para un transporte integrado el acceso a vías de comunicación o a otras modalidades de transporte de mercancías. Apuesta fuerte De esta forma, se apostará concretamente por la intermodalidad puerto-ferrocarril, al tratarse ésta última de una forma de transporte menos costosa y más respetuosa con el medio ambiente que el transporte por carretera. Esto quiere decir que en el Libro Blanco de la UE se dictarán directrices que favorezcan a aquellos puertos conectados al ferrocarril, lo que no sucede con Almería. Amate, tras asistir a la reunión de Barcelona junto al resto de los responsables de puertos de toda la Unión Europea, considera que Almería “pese a que se encuentra en una situación privilegiada en cuanto a pasajeros y mercancías por su proximidad al Norte de África, tendrá muchos problemas para la distribución, pues ésta sólo puede hacerse por carretera, y la UE va a ir marcando normas para restringir esta vía, por su apuesta clara por el ferrocarril, al ser más ecológico y limpio”. Un problema nuestro Para José Antonio Amate está muy claro que quien debe resolver este problema es únicamente la ciudad de Almería. “Es un problema nuestro, de los almerienses, y somos nosotros los que debemos solucionarlo”. Amate está también convencido de que “la entrada del ferrocarril en el puerto afianzará no sólo este medio de transporte, sino que también puede ayudar a que la conexión con el Levante sea más rápida”. Además, el presidente de la Autoridad Portuaria Almería- Motril cree que la conexión podría hacer posible que muchos de los trabajadores de Renfe que han sido trasladados de Almería con motivo de la supresión de la línea con Alquife, para el transporte del mineral, pudieran volver: “Esto haría que Renfe estudiara consolidar la plantilla y que retornaran algunos trabajadores”.